Fue liberado desde Mar del Plata y viajó hasta Brasil. Sus movimientos son rastreados a través de un dispositivo. Una de las investigadoras que participó de esta misión nos cuenta los detalles del gran operativo.
Ahora nada en aguas cálidas de la costa brasileña. Recorrió varios kilómetros hasta llegar ahí, en lo que se podría describir como el viaje de su vida. El tortugo Jorge, que se rehabilitó en el Centro de Rehabilitación de Fauna Marina de Mar de Plata Aquarium, finalmente volvió a su hábitat natural.
Después de muchos preparativos y ante el cierre del Aquarium, el 11 de abril fue transportado en una caja especialmente diseñada para él hasta el Guardacostas GC-72 “Buenos Aires” de la Prefectura Naval Argentina, que lo trasladó unas 10 millas náuticas mar adentro (unos 18 kilómetros de distancia respecto a la costa de la ciudad balnearia).
Al arribar al sitio indicado por los especialistas del Centro de Rehabilitación de Fauna Marina del Aquarium, el recipiente que contenía a la tortuga fue bajado al mar con la pluma (una grúa que se utiliza para izar y arriar cargas) del guardacostas y allí era esperado por un nadador de rescate de la Prefectura y uno del Aquarium, quienes recibieron la caja y concretaron el regreso del animal a su hábitat natural.
Se vivieron momentos de emoción en el lugar: después de cuatro décadas en cautiverio, Jorge volvió al mar. El animal tiene consigo un rastreador que permite sumar información de las rutas migratorias de la especie.
CENTRAL dialogó con una de las profesionales que realiza el seguimiento del tortugo desde que se sumergió rumbo a Brasil. Mariela Dassis, investigadora y doctora en Ciencias Biológicas,observa en los monitores cada kilómetro recorrido por el animal liberado.Todo marcha como lo esperaba el equipo que formó parte de esta importante misión.
PUNTO DE PARTIDA
¿De qué especie es Jorge y cuál es su lugar de origen?
Jorge es una tortuga de la especie que se llama Carettacaretta, que es conocida también con el nombre común de “tortuga cabezona” o “tortuga boba”. Su lugar de origen es al norte Brasil. Por los análisis genéticos, se sabe específicamente que él es originario de Playa Do Forte, al norte de Salvador de Bahía.
Se calcula que tiene unos 60 años de edad.Fue capturado en el año 1984, en Bahía Blanca, donde fue pescado accidentalmente por pescadores locales y se estima que en ese momento era entre juvenil y subadulto, que tenía aproximadamente 20 años, sumados a los 40 totales que pasó en cautiverio, 38 en Mendoza más dos años en el Aquarium, se cree que tiene alrededor de 60 años.
La longevidad de las tortugas es muy alta y para esta especie se calcula que pueden vivir entre 80 y 100 años, o incluso más. Es muy difícil de determinar, así que probablemente él tenga entre 20 y 40 años más de vida libre o incluso puede ser más.
¿Cómo fue su llegada a Mar del Plata?
Él estuvo esos 38 años en el ex acuario de Mendoza, que hoy está cerrado y se transformó en un centro de interpretación. La actual gestión municipal de Mendoza tomó la decisión de cerrar este lugar y de redireccionar los animales que tenía. Ahí surgió la incógnita de qué hacer con Jorge y se propuso evaluar la posibilidad de reinsertarlo a su medio natural, por eso se comunicaron con Mar del Plata Aquarium, donde pasó dos años y un poquito más también fue de cautiverio, pero con el plan de reinsertarlo a su medio natural.
O sea, los últimos dos años fueron de todo este proceso de enriquecimiento ambiental y todo el plan programado para ver si respondía bien y se podía considerar que estuviera en condiciones de ser liberado a su medio.
La decisión de liberarlo se tomó en Mendoza. Los cambios que hay a nivel mundial de conciencia sobre lo que implica el cautiverio y tener este ejemplar marino en aguas dulces en la cordillera no era lo correcto.Y esto comenzó a comprenderse. Finalmente, la decisión de liberarlo se terminó de concretar cuando vieron que, en este proceso de intento de reinserción al mar, él respondió favorablemente a todos los estímulos y a todas las situaciones que se le fueron planteando.
EL ENTRENAMIENTO PARA VOLVER A CASA
¿Cómo fue la preparación para la liberación?
Comenzó en Mendoza, ya en comunicación entre la municipalidad de aquella localidad y el Aquarium de Mar del Plata. Ahí empezó el proceso de readaptación al agua salina. No es que estuvo completamente en agua dulce en Mendoza, pero casi. Ellos le ponían sal al agua. Entonces, realizaron un período de readaptación al agua salina con el cual le fueron aumentando progresivamente la salinidad estando aún en Mendoza. Le realizaron distintos análisis de sangre para ver cómo respondía y si él podía regularse normalmente en agua salada. Lo logró y eso fue positivo, por eso se procedió al traslado desde Mendoza a Mar del Plata, y en Mar del Plata se lo puso directamente en agua marina.
Esa fue la primera etapa. La segunda fue todo lo que se llama enriquecimiento ambiental, donde se le dan condiciones, aún en cautiverio, lo más parecidas a la a su medio natural. Para eso, el primer gran cambio fue pasar de 20.000 litros de agua en la pileta Mendoza a 120.000 litros, lo cual le permitía un lugar mucho más grande, mucho más espacioso para empezar a moverse de otra manera y poder ejercitar sus músculos. Simplemente el hecho de darle un lugar más grande lo hizo recuperar su musculatura y su actividad física.
En concordancia con eso, también se le empezó a dar alimento vivo, como cangrejos, peces y caracoles, para que volviera a acostumbrarse a su dieta natural y para que empezara el proceso de capturar las presas.Era una de las cuestiones más importantes para ver si estaba apto. Superó muy bien estas etapas.
Otra de las partes del enriquecimiento consistió en hacerlo coincidir en su misma pileta con otras especies que competían justamente por el recurso alimenticio. Se le colocaron chuchos y otras especies más grandes para que él tuviera que no solo cazar el alimento vivo, sino cazarlo antes que otro lo hiciera. Fue ponerlo en un escenario de competencia natural con otras especies como ocurriría en el mar. Esos fueron los pasos más importantes.
A su vez se lo dejó de exhibir al público, con lo cual se fue desensibilizando de la presencia humana y se fueron generando todas estas condiciones lo más parecidas posible a su medio natural.
EQUIPADO PARA EL VIAJE
¿Cómo se lo sigue y se conoce su ubicación?
Lo seguimos a través de un dispositivo satelital que se llama Spot 6 de la marca Wildlife Computers, que es una empresa que fabrica instrumentos precisamente para el seguimiento satelital de animales silvestres en todo el mundo.
Ese instrumento está pegado en el caparazón de Jorge, se lo pegué yo con un kit de fijación que fue adquirido por la gente de Aquarium, un kit de fijación específico para tortugas en el que se usan dos tipos de epoxi, uno que no calienta para no molestarlo, en un principio pegado al caparazón, más una malla de fibra de vidrio, y otro epoxi tipo masilla, donde se hace una especie de capita y se coloca este instrumento lo más hidrodinámico posible para no molestarlo. De todas maneras, es un instrumento que pesa menos de 200 gramos.
Tiene una antena y un sensor de conductividad y humedad que detecta cuando está seco, es decir, cuando Jorge saca su caparazón, queda expuesto el instrumento y la antena,se prende y empieza a mandar una señal. Esa señal es captada por los satélites que hay en vista. Esos satélites mandan información a la empresa Argos, la cual se contrató para el servicio satelital.
Esa empresa estima las posiciones geográficas de Jorge en relación con estos mensajes y envía las coordenadas a mi computadora, donde voy generando mapas sobre dónde está Jorge. Las posiciones varían de acuerdo a la cantidad de tiempo que él esté con el caparazón expuesto y a la cantidad de satélites que tenía en vista de acuerdo a la latitud y el horario.Cuantos más satélites en vista y cuanto más tiempo esté afuera, da posiciones de mejor calidad.
En posiciones de buena calidad podemos llegar a saber dónde está Jorge con una precisión cercana a los 100 o 150 metros. De hecho, probando el instrumento en mi casa tuve una precisión de menos de 50 metros.
Estos equipos de seguimiento funcionan con una batería, ¿qué pasa si se agota?
Es muy importante aclarar que estos instrumentos tienen una vida útil que depende fundamentalmente de sus baterías y que en un momento no vamos a tener más noticias de Jorge.Esto es lo normal, cuando dejan de transmitir simplemente no se sabe más del animal, no quiere decir que al animal le fue mal. Si todo funciona bien, es decir, si su antena no se rompe por chocarse con alguna madera o algún objeto en el mar, y si los sensores no se tapan con organismos incrustantes, para lo cual le pusimos una pintura antifouling, ese instrumento cumplirá su ciclo.
Las baterías en este tipo de instrumentos dependen de la programación del aparato y del comportamiento del animal. Si el animal pasa mucho tiempo en superficie, va a gastar mucha batería y si no, lo contrario. El tiempo esperado es muy variable, es muy difícil de determinar. Podríamos estar hablando de 10 días o de dos años. El promedio en tortugas con una programación parecida a la que le puse es de seis meses. Tienen que darse en muchas condiciones para que dure seis meses. Hasta ahora estamos en un mes y medio y es sumamente positivo el resultado.
La instrumentación del animal, más allá de todo el proceso de rehabilitación y traslado de Mendoza a Mar de Plata, que fue muy complejo y muy costoso y que requirió muchos recursos económicos y humanos, también implicó el esfuerzo de recursos de investigación, porque para tener estos instrumentos en el agua, primero hay que comprarlos. Son caros, cuestan entre 1600 y 1800 dólares. A la vez hay que pagar un servicio satelital mensual y hay que tener estos kits de fijación que están en el orden de los 100 o150 dólares.
Este instrumento fue donado por mi laboratorio, el Laboratorio Biología, Ecología y Conservación de Mamíferos Marinos del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras, Universidad – CONICET. El servicio es pagado mensualmente por la Municipalidad de Mendoza y el kit de fijación fue adquirido por Mar del Plata Aquarium.
Esto refleja algo que a mí me llama mucho la atención, y para bien, que fue la gran coordinación y el gran esfuerzo entre instituciones que hubo en el caso de Jorge. Y no quiero dejar de mencionar al Museo Argentino de Ciencias Naturales de Buenos Aires, que también participó en esta instancia.
¿Qué otra información se obtiene del dispositivo, más allá de la ubicación?
La importancia de la información que nos brinda Jorge tiene dos puntos claves. El primero, y quizás el que motivó todo este esfuerzo, es que este telémetronos permitever cómo le está yendo. Si bien por ahí teníamos problemas con la batería y dejaba de transmitir, o se rompía la antena y no íbamos a tener una idea del escenario negativo, como le está yendo bien, el instrumento nos da mucha información de cómo resultó este proceso de reinserción en su medio natural. Y eso es muy bueno, teniendo en cuenta que es un caso muy extremo de 40 años de cautiverio.No hay otra tortuga con este nivel de años en cautiverio. Hay una que está entre 10 y 15 años, que le fue bien, que también se la siguió por telemetría.
Eso es un punto sumamente importante y nos está dando buenas noticias. Pero el otro punto es que él además de eso nos brinda información muy importante a nivel científico, sobre todo por ser un macho adulto de la especie. Normalmente los machos adultos de la especie no se instrumentan. Hay muy pocos casos y no sé si Jorge no es el primero de esta especie. ¿Por qué? Porque se instrumentan las hembras cuando salen a desovar, se aprovecha para poner estos telémetros y se puede estudiar la vida de las tortugas en el mar, pero normalmente de hembras. Jorge es un macho adulto y realmente no se conoce o se conoce muy poquito de su vida en la naturaleza, con lo cual Jorge, con esta experiencia, nos está haciendo el regalo de contarnos mucho de la especie.
Las posiciones todavía están llegando todos los días, una vez por día, varias posiciones por día. Todavía no se puede hacer un análisis, pero nos va a indicar cuestiones de selección de hábitat, qué movimientos puede hacer, qué velocidades y qué áreas son preferenciales.
Todo este mapa de posiciones que yo voy generando día a día, lo puedo plotear en el sistema de información geográfica, superpuesto a información oceanográfica y de batimetría. Por ejemplo, puedo ver si eligió alguna batimetría, alguna profundidad del mar en especial. Puedo ver si los movimientos fueron más determinadospor la corriente o por la temperatura superficial del mar, que fue uno de los factores más importantes que lo hacen moverse rápidamente. Nos va a dar un montón de información.
Si bien es un único ejemplar, como te decía, es uno de los primeros machos adultos de esa especie y nos da una información importantísima a nivel científico, que se va a saber con más detalle una vez que termine de transmitir y podamos filtrar y ordenar todas estas posiciones y hacer estos análisis.
LA TRAVESÍA DE JORGE Y SUS INDICIOS
¿Se sabe cuál es su estado general?
No tenemos manera de saberlo, pero sí podemos inferirlo en base a lo que estábamos viendo por sus posiciones. Hay cosas positivas sobre las cuales se tenía mucha duda y que Jorge este mostrando que están bien,que puede indicar un estado general bueno. Por ejemplo, que se supo orientar y fue directamente hacia el norte, nunca cambió su rumbo, o sea, que fue directamente hacia las aguas cálidas.No hubiera sido una buena noticia que fuera hacia el sur, porque hubiera sufrido hipotermia y no hubiera ido hacia el lugar donde puede de vivir.
Segundo, los movimientos que mostró el primer mes fueron unos desplazamientos que duraban entre medio día, un día o un día y medio, sostenidos. Luego pasaba uno o dos días de descanso en otra área y reiniciaba esos movimientos sostenidos. Y en esos movimientos tuvo desplazamientos a una velocidad acorde para su especie.
En uno de los primeros desplazamientos hizo entre 24 y 30 horas para desplazarse entre 60 y 80 kilómetros, lo cual es un montón. Al mostrarnos que está orientado y que se mueve a velocidades esperables para su especie, nos da una idea de que está en buenas condiciones físicas. Si bien no lo podemos saber, sí lo podemos inferir de acuerdo a lo que él muestra según su posición geográfica.
Y un tercer punto en el cual se tenía mucha preocupación era ver si se podía alimentar solo en el mar. Y la verdad que no lo podemos saber, pero por el tiempo en que lleva desplazándose bien, se cree que sí. Hubo dos ocasiones que nos hacen pensar aún más fuertemente que sí: una fue en Piriálpolis, Uruguay, y la otra fue al sur de Brasil, en las cuales la posición geográfica de Jorge coincidía con avistajes en ese mismo momento y en ese mismo lugar de grupos de tortugas de su misma especie en la orilla.
Hubo dos veces que se acercó a la orilla y que coincidió con otras tortugas que se estaban alimentando en la zona y que se estaban desplazando en zonas típicas de alimentación de tortugas, sobre todo zonas rocosas costeras.
Así que tampoco es una confirmación si está comiendo, pero es muy probable que lo esté haciendo porque ya lleva un mes y medio en el agua, porque sigue orientado, porque sigue desplazándose bien y por estos dos avistajes que mencionaba.
¿Cuáles son los mayores peligros que debe enfrentar Jorge, o esta especie, en el mar?
Lamentablemente el mayor peligro es el humano. Son las acciones antropogénicas y es precisamente la captura incidental en la pesca, ya sea una pesca de arrastre o de agalleras costeras, los conocidos trasmayos, porque pueden enredarse. Ese es uno de los principales problemas de conservación que tienen esta y otras especies de tortugas marinas.
De hecho, esto es lo que le pasó a Jorge. Fue capturado incidentalmente una vez, por eso, por probabilidad esperemos que no le pase dos veces. Esperemos que vea un barco y se aleje, pero es un peligro muy importante que enfrentan todas las tortugas marinas y es una de las cuestiones que más preocupan hoy en día para la conservación de estas especies.
También hay un tema con la contaminación y con la ingestión de plástico que puede afectarlo. Esa es otra de las esas amenazas que tiene.Y a nivel de predadores naturales, cuanto más al norte vaya, más chance de tener encuentros con tiburones, de cada vez mayor tamaño, que viven en aguas más cálidas. Pero por lo que se sabe hasta ahora y todo lo que se estudia, el principal peligro siguesiendo las redes de pesca.
¿Cómo te imaginas el futuro de Jorge?
El mejor. Todos tuvimos muchas dudas, hubo mucha gente trabajando en esto. Yo nunca vi tanta gente trabajando para una misma causa y todos con el mismo nivel de incertidumbre.Tanto los que pensaban que esto iba a funcionar bien, como los que pensaban que no, con justa razón. Lo que ha mostrado hasta ahora, de los escenarios posibles, es el mejor.
O sea, yo me hubiera imaginado esto en su momento hace un mes y medio atrás, cuando se lo liberó y lo vi en ese barco, en ese mar tan bravo, ese día de la liberación que casi no pudimos sacar fotos porque estábamos todos vomitando de lo feo que estaba el mar.
Nos daba mucha duda qué iba a pasar y él empezó a mostrar todos estos comportamientos y nos dio en este mes y medio el mejor escenario. Así que, después de esa respuesta suya, ahora sí imagino el mejor escenario.
No se sabe mucho de los machos adultos, pero es muy posible que vuelva a su colonia de origen, que vuelva a Praia do Forte, y es posible que lo haga en época reproductiva.Y si bien tampoco es del todo clara la edad reproductiva máxima, se cree que llega a los 60 años o más.Con lo cual podría estar en estado reproductivo aún, podría regresar a esas colonias y, en el mejor de los casos, el escenario más lindo que me imagino es que pueda haber Jorgitos y Jorgitas. Eso no nos vamos a enterar porque si eso ocurre, es en el mar y luego la que salea desovar es la hembra, así que uno no puede enterarse.
Pero bueno, Jorge está siendo muy famoso, hay muchos barcos de Argentina, Uruguay y Brasil avisados de su viaje. Muchos barcos que cooperan con investigadores de Brasil y todos los investigadores de tortugas, así que hay mucha gente atenta y avisada. La probabilidad es baja, pero no me extrañaría de volver a ver una foto de Jorge. Y ya a esta altura, aunque no vuelva a su colonia de origen, me imagino un buen escenario si se queda ahí por las aguas de Brasil, aunque sea más al sur.
Un espacio necesario que ya no existe
“¿Qué futuro me imagino para Jorge?”, se volvió a preguntar Mariela Dassis. “El mejor futuro, pero me queda mucha preocupación por todos los Jorges que no se ven ni en la tele ni en la radio, que son todos los animales que rehabilitaba el Centro de Rehabilitación de Fauna Marina de Mar de Plata Aquarium, y que con su cierre significa una pérdida muy importante para todos”, reflexionó la investigadora.
Es que, si reciben un aviso por un animal lastimado, ya no tienen dónde brindarle la atención que requieren. Y contó que no solo se trataba de animales marinos, sino también de otras especies que viven en General Pueyrredon y la zona, que, si era necesario, los llevaban al centro de rehabilitación y luego se liberaban.
“Todo ese trabajo se perdió en la ciudad”, advirtió y aclaró que ahora solo queda Mundo Marino como Fundación de Rehabilitación.
Sin embargo, la esperanza es lo último que se pierde. “Quizás es utópico, pero hay mucha gente que está pensando la posibilidad de obtener algún otro tipo de financiación para continuar con este centro de rehabilitación, ya sean las instalaciones que quedaban o en algunas instalaciones nuevas, porque ahí había profesionales formados, infraestructura y todo lo necesario para ese trabajo que se perdió”, detalló.
Es que el contexto ecológico preocupa, porque, según Dassis, el escenario de creciente presión pesquera, contaminación y la posible explotación petrolera genera “una necesidad cada vez más grande para la ciudad”, de un espacio de atención para la fauna marina.